"El bombero al que nadie llamó", de Wilbert Torre

El 11 de septiembre de 2001, Rafael Hernández se encontraba en Nueva York cerca de las Torres Gemelas cuando se produjo el atentado. El bombero mexicano no lo pensó dos veces y comenzó a trabajar como voluntario removiendo escombros y tratando de salvar vidas, pero “su heroísmo”, como explicaba la revista Proceso, que concedió su premio internacional 2011 a este trabajo, “le pasó la factura: diez años después murió a consecuencia del humo y el polvo que respiró cuando las dos estructuras se derrumbaron… Su familia aún espera la compensación económica que el gobierno estad0unidense le prometió”.

El periodista Wilbert Torre, que cubrió el atentado para el diario mexicano Reforma, buscaba una “historia personal con la potencia suficiente para aproximarme en forma tangencial a aquel hecho abominable y descubrir sus consecuencias y significados”. A través del Consulado de México en Nueva York, Torre conoció la historia de Rafael Hernández. Tras varias entrevistas telefónicas, el periodista viajó a Nueva York para conocer al bombero. Después de comprobar la veracidad del relato de Rafael Hernández, Wilbert Torre estaba convencido de que valía la pena contar la historia del bombero al que nadie llamó. | Acceder